Los cuerpos oscuros me subyugan mucho más. Manuel Mendive

Llevo muchos años trabajando el cuerpo, me es tan familiar como trabajar en un papel o en una tela. La piel como otro elemento me brinda posibilidades de texturas, por la porosidad, por su color, por su brillo, por su dulzura…: Siempre hay algo que a uno lo motiva, siempre hay un sentimiento hermoso, erótico. Eso te inspira a crear distintos personajes o distintas energías que están en la naturaleza y que las paso al cuerpo, las represento en el cuerpo humano. También está el músculo, y la energía que tenga en este caso el modelo, el bailarín, y como yo ponga un elemento en el cuerpo, él lo va a mover y va a cobrar vida. Esto es muy interesante porque es una pintura en movimiento, una pintura que se traslada, que va desde mi cabeza hasta el infinito, y muy importante y agradable porque el público puede ser partícipe de esa conversación o de esa gran historia que estoy contando en ese momento. Cuando el público se incorpora, y logro pintarle una mano, quizás un brazo, un rostro, ya no es un espectador sino que es también un personaje que está en mis cuadros ...